Crédito de la foto: Jaromir Chalabala / EyeEm / Getty Images
Algunos perros pueden ser especies bastante motivadas por la comida, por lo que es natural que se entusiasmen con sus alimentos. Las sobras de los cazadores-recolectores son lo que se cree que domesticó a los lobos grises, de los que desciende el perro moderno. Pero, si cree que su perro puede estar demasiado motivado por la comida, es decir, si su perro siempre ladra y gimotea pidiendo comida, incluso después de haber sido alimentado, es posible que desee investigar más a fondo este comportamiento. Éstas son algunas de las razones por las que su perro siempre tiene hambre.
Dieta inadecuada
La comida debe cumplir su función principal de proporcionar una nutrición correcta al organismo de su perro. Tanto la sobrealimentación como la subalimentación provocarán que su perro esté siempre hambriento. Consulte a un nutricionista de mascotas y elija un plan dietético adaptado a las necesidades y el estilo de vida de su perro.
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Malabsorción de nutrientes
Puede que alimente a su perro con una dieta rica en nutrientes, pero si su organismo no es capaz de absorberlos, siempre le pedirá más comida. La malabsorción de nutrientes se debe a varias causas, como infecciones parasitarias, trastornos gastrointestinales como el síndrome inflamatorio intestinal, insuficiencia pancreática exocrina, sobrecrecimiento bacteriano en los intestinos o incluso cáncer. Consulte a su veterinario y hágase un chequeo exhaustivo para conocer la razón subyacente de la insaciabilidad de su perro.
Trastornos metabólicos y hormonales
La diabetes provoca una falta de insulina a pesar del exceso de glucosa en el torrente sanguíneo del perro. Esto atrapa la glucosa fuera de las células del cuerpo, enviando señales al cerebro del perro que indican que siguen teniendo hambre. Las inyecciones de insulina y los cambios en la dieta pueden ayudar a controlar la diabetes.
El hiperadrenocorticismo, también conocido como enfermedad de Cushing, es un trastorno hormonal que conduce a una producción excesiva de glucocorticoides -una hormona que ayuda a los perros a controlar el estrés-, lo que provoca un aumento del apetito. Una vez diagnosticada, el veterinario prescribirá medicación para tratarla.
Medicamentos
Esta puede ser una situación un poco complicada. Si su perro toma medicamentos como suplementos tiroideos, sedantes corticosteroides o anticonvulsivos, es posible que pida comida todo el tiempo. Pida a su veterinario que modifique la dosis o considere un fármaco alternativo. También puede dar a su perro una comida adecuada, como una verdura de bajo índice glucémico, para controlar los efectos secundarios del fármaco Prednisona.
Factores psicológicos
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Algunos perros pueden ser especies bastante motivadas por la comida, por lo que es natural que se entusiasmen con sus alimentos. Las sobras de los cazadores-recolectores son lo que se cree que domesticó a los lobos grises, de los que desciende el perro moderno. Pero, si cree que su perro puede estar demasiado motivado por la comida, es decir, si su perro siempre ladra y gimotea pidiendo comida, incluso después de haber sido alimentado, es posible que desee investigar más a fondo este comportamiento. Éstas son algunas de las razones por las que su perro siempre tiene hambre.
Dieta inadecuada
