Es cara la comida para perros en 2024 por la inflación?

A medida que las tasas de inflación fluctúan, los consumidores siguen lidiando con el aumento de los precios en diversos sectores y la industria de alimentos para perros no es diferente. A pesar de un descenso gradual de las tasas de inflación interanuales mensuales desde 2022 en Estados Unidos, los precios de la comida para perros siguen siendo preocupantes, ya que se han encarecido bastante en los últimos años.

¿Por qué es cara la comida para perros en 2024?

Los precios de los alimentos para perros se han disparado en los últimos años, con un asombroso aumento de casi el 24% en 2024 en comparación con enero de 2021, según Pet Food Industry. Además, si se compara con enero de 2019, el repunte aumenta hasta el 26,5%.

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Un factor que influye en los precios de los alimentos para mascotas son los costos de producción, que se miden a través del índice de productores de alimentos para mascotas (PPI). La investigación de John Gibbons ha revelado que los precios de producción de los alimentos para perros han mostrado fluctuaciones mínimas desde marzo de 2023.

La estabilidad de los precios de producción sería normalmente algo positivo. Sin embargo, los niveles persistentemente elevados de estos costes presentan un aspecto preocupante de la situación.

¿Es cara la comida para perros a causa de la inflación?

Según Forbes Advisor, un IPP elevado provoca inflación que, a su vez, se traduce en precios altos para los consumidores.

En enero, el IPP de los alimentos para mascotas descendió ligeramente hasta el 6,4% interanual desde el 6,6% de diciembre de 2023. Sin embargo, los costes de producción siguieron siendo significativamente elevados. De hecho, experimentaron un aumento del 28,4% desde enero de 2021 y del 30,7% desde enero de 2019.

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Además, los precios están subiendo, especialmente durante los meses de primavera, lo que podría provocar pequeñas subidas mensuales en los gastos de comida para perros.

En palabras de Gibbons, «la subida del IPP en primavera de 2023 fue menor que en 2022. Además, empezó dos meses antes que en 2022 y sólo duró un mes, en lugar de dos».

Además, mencionó que los precios de producción tienden a mantenerse estables durante aproximadamente ocho meses. Por tanto, dado que la estabilidad actual dura 10 meses, es posible que pronto se produzca un aumento.

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