He tenido perros casi toda mi vida. Pero al igual que los niños, cuanto más tiempo los tengo, más aprendo. Nunca supe que a un perro se le cayeran los bigotes antes de adoptar a mi mezcla de Beagle, Chance.
Cuando empecé a encontrar sus bigotes, normalmente en la cama, al principio me asusté. Nunca había visto esto antes, y empecé a preocuparme de que tal vez estuviera enfermo.
Cómo mantener un vínculo fuerte entre usted y su perro
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Afortunadamente, algunas investigaciones me aclararon el asunto. Aunque la pérdida de bigotes puede ser un indicador de enfermedad, si el ritmo de pérdida no es grave, probablemente no haya motivo para preocuparse.
He aquí algunas cosas que aprendí.
¿Qué son los bigotes y por qué los tienen los perros?
Dado que los perros utilizan la cara para interactuar con el mundo de forma muy parecida a como las personas utilizamos los dedos, los perros tienen bigotes muy desarrollados. Se trata de pelos largos y ásperos que suelen verse en el hocico, pero también en la cara y la barbilla de un perro.
Estos bigotes tienen densas terminaciones nerviosas empaquetadas en la base de sus folículos que envían señales al cerebro del perro. Son muy sensibles a cosas como las corrientes de aire y los cambios de temperatura.
También se especula que los bigotes dan a los perros una idea del espacio que rodea sus cabezas, por lo que tienen un mejor sentido de su entorno físico.
Por eso nunca debe recortar los bigotes de su perro, ya que esencialmente está alterando un órgano sensorial para ellos. Hacerlo puede volverlos malhumorados, irritables y agresivos.
¿Por qué se caen los bigotes?
(Crédito de la imagen: Getty Images)
Entonces, si los bigotes son tan importantes, ¿por qué se caen? Bueno, la respuesta más fácil es que ¡simplemente se caen! Los humanos necesitamos nuestra piel, pero estamos en un estado constante de muda de piel a nivel celular todo el tiempo – ¡hola polvo!
Para nuestros perros, esto no es diferente. De hecho, es habitual que los bigotes de los perros se astillen o simplemente se caigan con el tiempo. Pero mientras los bigotes lo hagan de forma natural, y no debido a la interferencia de personas o enfermedades, deberían volver a crecer, y los perros nunca deberían perder los suficientes como para dejarlos desorientados.
Dicho esto, si alguna vez tiene dudas y sospecha que su perro muestra algún signo de enfermedad, no dude en llevarlo a un profesional veterinario. ¡Más vale prevenir que curar!
