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¿Los perros pueden comer cacahuetes? La respuesta corta es sí, los perros pueden comer cacahuetes, pero hay algunas grandes excepciones y cosas que debe saber antes de dárselos de comer a su perro.
Los cacahuetes tienen un alto contenido en nutrientes beneficiosos y saludables para su perro, pero sólo deben comerse con moderación, y sólo los frutos secos sin sal ni sabor y sin cáscara son seguros para su consumo.
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Como siempre, debe consultar a su veterinario antes de compartir alimentos humanos con su perro, incluidos los cacahuetes. Demasiados cacahuetes pueden provocar molestias gastrointestinales a corto plazo y pancreatitis a largo plazo. Además, algunos perros no mastican bien los cacahuetes, lo que puede provocarles una obstrucción intestinal.
Si desea alimentar a su perro con cacahuetes o productos a base de cacahuetes, como la mantequilla de cacahuete, debe asegurarse de que se preparan adecuadamente y de que son seguros para su perro. Si se sirven correctamente, pueden constituir una golosina saludable de vez en cuando para los perros. Esto es lo que debe saber sobre la alimentación de los perros con cacahuetes.
¿Por qué son buenos los cacahuetes para los perros?
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Los cacahuetes están llenos de valiosas vitaminas y nutrientes. Tienen un alto contenido en vitaminas B6 y E, niacina, proteínas y grasas saludables. Estas son cosas que la mayoría de los perros anhelan, por lo que su perro probablemente encontrará en estos frutos secos una sabrosa golosina.
Siempre que los frutos secos estén tostados en seco o crudos, sin sal ni aromatizantes y sin cáscara, suelen ser seguros para el consumo y constituyen un tentempié saludable.
Sólo asegúrese de consultar a su veterinario antes de dar a su perro cacahuetes o cualquier otro tipo de alimento humano.
¿Cuándo son malos los cacahuetes para los perros?
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Hay varias formas en que los cacahuetes pueden ser peligrosos para los perros. Las cáscaras son difíciles de digerir y pueden causar obstrucción intestinal o ser un peligro de asfixia, y los frutos secos, en sí mismos, pueden ser difíciles de masticar. Si se ingieren, también pueden causar obstrucción gastrointestinal.
Los cacahuetes tienen un alto contenido en grasa, que puede ser buena en cantidades adecuadas. Sin embargo, demasiada grasa puede provocar malestar estomacal y, a largo plazo, puede causar pancreatitis. Sólo debe dar cacahuetes a su perro de vez en cuando y con moderación.
Los cacahuetes salados son demasiado ricos en sodio para los perros, y los cacahuetes aromatizados pueden contener sustancias químicas artificiales y otros productos que no están destinados a ser consumidos por los caninos. Demasiado sodio puede provocar una toxicosis por iones de sodio.
Si su perro coge uno o dos cacahuetes salados que se han caído al suelo, no debería suponer un gran problema. Pero demasiados pueden causar problemas médicos graves.
Es importante tener en cuenta que los cacahuetes son un alérgeno común, incluso entre los perros. Algunos perros pueden desarrollar una alergia que puede ir de leve a grave. En algunos casos, los perros pueden sufrir anafilaxia, una reacción alérgica potencialmente mortal.
Si observa los signos de una reacción alérgica en su perro, como tos, estornudos, urticaria, hinchazón, dificultad para respirar u otros síntomas, póngase en contacto con su veterinario de inmediato y deje de darle cacahuetes.
¿Cómo debe alimentar a su perro con cacahuetes?
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En primer lugar, consulte a su veterinario antes de dar a su perro cacahuetes o cualquier otro alimento humano. Ellos pueden aconsejarle sobre si su perro en concreto puede comerlos sin peligro y qué cantidad debe dar a su cachorro en una ración.
Si obtiene el visto bueno de su veterinario, recuerde que los cacahuetes hervidos, tostados o crudos suelen ser una golosina segura siempre que les quite la cáscara y se asegure de que no contienen sal ni aromatizantes. Asegúrese de que su perro los mastica completamente para que no le provoquen una obstrucción intestinal.
Una forma de evitar el bloqueo gastrointestinal es moler los cacahuetes o servirlos en forma de mantequilla de cacahuete. Tenga cuidado al elegir una mantequilla de cacahuete para su perro, ya que algunas marcas contienen xilitol, un edulcorante artificial tóxico para los perros. El xilitol también aparece en muchas golosinas, dulces y postres.
Puede preparar su propia mantequilla de cacahuete para estar seguro, pero compruebe siempre las etiquetas de los alimentos para ver si contienen algún ingrediente con el que no esté familiarizado.
Puede utilizar los cacahuetes como recompensa por hacer trucos o colocarlos en un comedero rompecabezas para conseguir una estimulación mental extra. Para mantener a los perros ocupados durante un rato, puede untar mantequilla de cacahuete en un juguete como un Kong e incluso congelarla para obtener una golosina refrescante.
También puede utilizar cacahuetes y mantequilla de cacahuete en varias recetas de golosinas para perros si le gusta hacer bocadillos caseros para su cachorro. De nuevo, asegúrese de que los ingredientes no incluyan xilitol.