¿Pueden comer chirivías los perros? A los amantes de la comida sana les encanta sustituir las patatas fritas por patatas fritas con chirivía asada -y, de hecho, son deliciosas-, pero ¿puede compartirse algo así con un perro? ¿Es seguro que los perros coman chirivías?
La respuesta corta es sí, las chirivías son seguras para que las consuman los perros. Crudas, o cocidas, las chirivías son similares a las zanahorias y pueden comerse de cualquier forma. Por supuesto, si se le ocurre hacer chirivías fritas para su cachorro, asegúrese de prescindir de condimentos y ajo.
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No obstante, siempre debe consultar con su veterinario las nuevas incorporaciones a la dieta de su perro. Mientras tanto, aquí tiene todo lo que debe saber sobre cómo las chirivías son un nutritivo tentempié para su perro.
¿Por qué son buenas las chirivías para los perros?
La chirivía es una hortaliza de raíz, similar a otras aptas para perros como la zanahoria, el nabo y la remolacha. Por supuesto, hay hortalizas de raíz que son tóxicas para los perros, como el ajo y la cebolla, pero por suerte, las chirivías son bastante nutritivas y seguras para los perros.
Cargadas de vitamina C, B6, folato, potasio y fibra dietética, las chirivías tienen un valor nutritivo sustancial; no tanto como el nabo, que es básicamente un superalimento para perros, pero aun así son una gran opción como tentempié. ¡Son mucho mejores que unas simples patatas fritas!
La fibra dietética es realmente importante para los perros, al igual que la vitamina B6. La vitamina C es importante en general, pero los perros la producen por sí mismos sin necesidad de suplementos dietéticos.
La vitamina B6 aporta una gran cantidad de energía metabólica, y todos sabemos lo importante que es para los perros metabolizar eficazmente lo que entra en su organismo.
Además, la chirivía también es rica en antioxidantes que contribuyen a la prevención del cáncer y a la función renal, alejando algunas de las enfermedades que pueden asolar a los perros en etapas posteriores de su vida.
¿Cómo puedo dar chirivías a mi perro sin peligro?
(Crédito de la foto: Sarsmis/Getty Images)
Las chirivías son seguras para que los perros las consuman crudas o cocidas, igual que los nabos o las zanahorias. La preparación es, por tanto, bastante directa, sencilla y basada en el sentido común.
En realidad, la preparación sólo incluye lavar, pelar y trocear, todas las cosas que haríamos con las chirivías para nuestro propio consumo.
El lavado es importante debido a los pesticidas que aún pueden permanecer en el exterior. O, como alternativa, puede utilizar un pelador para eliminar completamente la capa exterior, como hacemos a menudo con las zanahorias antes de cocinarlas.
Después, por supuesto, sólo tiene que cortar la chirivía en trozos, o en rodajas pequeñas si va a hacer chirivía frita.
Tenga en cuenta, no obstante, que la cantidad que dé a su perro es importante. Las chirivías tienen mucha fibra dietética, y demasiada puede causar un malestar estomacal extremo. Para un perro grande, media chirivía es probablemente suficiente, y menos para un perro más pequeño.
No obstante, debe evitar las chirivías en vinagre o enlatadas. Las chirivías enlatadas suelen estar cargadas de conservantes y sodio, que anulan su nutrición positiva. Y las chirivías encurtidas suelen elaborarse con ingredientes tóxicos para los perros, como el ajo y la cebolla.