¿Los perros pueden tomar aceite de pepitas de uva? Es posible que se pregunte esto porque usted utiliza este aceite por sus beneficios para la salud y quiere saber si puede compartirlo con su cachorro. Los humanos pueden tomar aceite de pepitas de uva, así que ¿también es seguro para los perros?
La respuesta corta es sí, el aceite de pepitas de uva es seguro para los perros. Es posible que sepa que las uvas son tóxicas para los perros y haya supuesto que el aceite de pepitas de uva compartiría las mismas propiedades tóxicas.
Si bien es cierto que no debe alimentar a su perro con uvas, el aceite de pepitas de uva es un antioxidante natural que tiene propiedades beneficiosas para su cachorro.
Al igual que con todos los alimentos para humanos, debe ponerse en contacto con su veterinario antes de dar cualquier nueva adición dietética a su perro. Esto es lo que debe saber sobre la alimentación de su perro con aceite de pepitas de uva.
¿En qué sentido es bueno el aceite de pepitas de uva para los perros?
Como su nombre indica, el aceite de pepitas de uva se elabora a partir de las semillas de la uva, que no son tóxicas para los perros. La piel y la pulpa de las uvas contienen las propiedades tóxicas que hacen que la fruta no sea segura para su amigo peludo.
El aceite de pepitas de uva es rico en ácidos grasos omega-6. Esta fuente de grasa es un componente esencial para la salud celular y la reproducción de su cachorro y también desempeña un papel en la salud inmunitaria.
¿Cómo puedo dar aceite de pepitas de uva a mi perro sin peligro?
(Crédito de la foto: Milena Khosroshvili/Getty Images)
Puede dar a su perro un chorrito de aceite de pepitas de uva en su comida para un refuerzo inmunitario extra. También puede cocinarle a su cachorro una comida especial con aceite de pepitas de uva.
Dado que el aceite de pepitas de uva tiene un alto contenido en grasa, es mejor dárselo a su cachorro con moderación. Esto es cierto para la mayoría de los aceites que son seguros para los perros con moderación, como el aceite de oliva y el aceite de coco.
Existe la posibilidad de que el alimento habitual de su cachorro ya contenga una cantidad elevada de ácidos grasos omega-6. Si este es el caso, probablemente debería evitar añadir más de esta grasa a la dieta de su cachorro.
Una mayor cantidad de omega-6 puede provocar problemas como diabetes y disfunciones del sistema inmunitario.
